Practicar sexo nos hace más inteligentes, según un estudio

 

Buenas noticias para los fogosos: si ya sabíamos que el sexo ayuda a quemar calorías, mantenernos en forma y reducir el estrés, ahora también sabemos nos hace más inteligentes, gracias a un reciente estudio llevado a cabo por la Universidad de Maryland (EE. UU.).
Aunque pueda sonar a estrategia poco elaborada para llevarnos a nuestra pareja a la cama, los resultados de las pruebas realizadas en ratones lo demuestran. Las pruebas desvelaron que la práctica del sexo aumenta la creación de neuronas dentro del hipocampo, el área del cerebro encargada de la memora a largo plazo. Por el contrario, cuando los roedores dejaban de practicar sexo su inteligencia decrecía.

“Hemos descubierto que, aunque se haya producido una producción de neuronas, las habilidades cognitivas adquiridas durante el experimento disminuyeron una vez los ratones fueron sometidos a largos periodos de inactividad sexual”, afirma el psicólogo de la investigación.
Además, pruebas realizadas con ratones adultos demostraron que la experiencia sexual repetida rejuvenece el cerebro, ya que promueve la neurogénesis adulta (creación de neuronas) y restaura la función cognitiva, siempre y cuando la experiencia persista durante todo el período de prueba. La medida en que los cambios en la neurogénesis adulta subyacen en los de la cognición son harina de otro costal y permanecen desconocidos.

Otro estudio de la universidad surcoreana de Konkuk añade un dato más: y es que esta actividad sexual, al promover la creación de neuronas, combate así los efectos dañinos del estrés para nuestro cerebro, que influye (y mucho) en la inhibición de la creación de nuevas neuronas.
Sin embargo, no todo van a ser días de vino y blanco satén: otro estudio de la universidad alemana de Duisburg -Essen demuestra que ver pornografía puede dañar el cerebro, ya que puede interferir en la memoria de las personas, en especial en su habilidad multitarea. Al parecer, la excitación sexual durante el sexo en Internet podría interferir con la capacidad de nuestra memoria de trabajo, lo que resulta en un descuido para discernir la información ambiental más relevante y, por tanto, nos hace tomar malas decisiones.
Dicho esto, queda claro lo que hay que hacer: más revolcones nocturnos como diurnos y menos onanismo en Internet, para que nuestras neuronas se multipliquen y conquisten nuestra cabeza. Es cuestión de tiempo que en las residencias de estudiantes universitarios se fomenten las relaciones carnales para llegar a la época de exámenes con el cerebro bien grande.

Los estudios:
Sexual experience restores age-related decline in adult neurogenesis and hippocampal function
Pornographic picture processing interferes with working memory performance

Y por ultimo un video sobre el tema:



Via: http://www.cookingideas.es